viernes, 1 de noviembre de 2013

Le debo a la autodestrucción una copa.

Esta chica odiaba tanto el tiempo que se pintaba relojes en las muñecas para creer que no pasaba. Y se enamoraba de imposibles para no creer en el amor. Y nunca hablaba para esconderse de los silencios. Y odiaba para no tener que confiar en nadie.
Pero nunca supo que hacer para no escribir.

2 comentarios:

  1. Hola compañer@ blogger!! somos "Memorias de una Lectora", un blog de literatura que acaba de iniciar su andadura , si te interesa la lectura, no lo dudes y echa un vistazo! Un saludo ^^

    ResponderEliminar
  2. Escribir nos salva
    Y nos hace un poquito más grande
    A todos
    Un beso♥

    ResponderEliminar